¡Que levante la mano a quién no le parece desagradable el hipo! Nadie podría, ya que es una sensación involuntaria que es muy molesta. Cientos de secretos para que se pase: asustarse, tomar líquido con la cabeza al revés e incluso pegarse un trozo de diario en la frente para terminar con la molestia dicen las abuelas.
Sin embargo, a Charles Osborne nada le hacía efecto. El estadounidense comenzó con sus crisis en 1922, justo después de una caída.
Mientras estaba trabajando perdió el equilibrio y cayó al suelo. Fue durante este accidente, que a primera vista parecía no tener consecuencias, que al hombre se le rompió un vaso sanguíneo en el cerebro.
Charles Osborne fue un hombre que duró 68 años con hipo (de 1922 a 1990) #RaFacts pic.twitter.com/ATlr2imG91
— Rafael Poulain △⃒⃘ ⚯͛ (@RafaelPoulain) 3 de julio de 2018
Esto provocó que la parte que inhibe el hipo dejara de funcionar, dicho problema no tenía cura. Cada día pasaba con el hipo por más de 40 minutos. Pero el hombre no detuvo su vida por este incidente, se casó dos veces, tuvo 8 hijos y ganó fama mundial participando en múltiples programas.
El hombre, que es parte de los Guinness World Records por el ataque de hipo más largo de la historia, murió a las 97 años y milagrosamente un año antes de morir dejó de tener hipo.