Un estudio científico publicado en Nature Communications, descubrió que las personas que mostraban niveles más altos de inteligencia tenían casi un 30% más de probabilidades de usar anteojos o lentes de contacto.
La investigación de la Universidad de Edimburgo analizó múltiples factores de más de 300 mil personas, tanto de su físico como de su estado mental. Ésta determinó que las personas con alto desempeño cognitivo suelen tener también problemas de visión.
Sus conclusiones indicaron que quienes utilizan lentes, son personas con mayor capacidad de actuar, reaccionar y racionalizar con más rapidez. Y pueden resolver problemas de manera más eficiente a diferencia de aquellos que no los usan.
El estudio también encontró que aquellos con una función cognitiva más alta también tendían a tener un riesgo reducido de tipos específicos de cáncer y de ataques cardíacos.
Otras evidencias empíricas demuestran que usar anteojos, hace que la persona sea percibida como más inteligente, más confiable, trabajadora y honesta. Pero cabe destacar que la investigación dice que no necesariamente es una causa directa, sólo que la inteligencia y usar lentes son dos propiedades que coinciden a menudo.