A pesar de la gran herencia que recibe del rey del Rock'n Roll, la única hija de Elvis Presley declaró estar en la quiebra y que sus deudas alcanzan los US$16 millones.
La mayor parte de sus deudas corresponden al no pago de impuestos entre los años 2012 y 2015, que alcanzaron la suma de US$10 millones, más la hipoteca de cerca US$6 millones de su casa en Inglaterra.
A pesar que afirmó que la tiene a la venta, no tiene compradores interesados, por lo que su deuda no se verá aliviada en un buen rato. Además, debe pagar sus tarjetas de créditos y los gastos en abogados por los trámites de divorcio.
Su ex pareja le exigió el pago de los honorarios de su abogado, por lo que Lisa Mary debió revelar su crítica situación financiera.
Cabe destacar que el año 2004 recibió una gran suma de dinero, al vender el 85% de Elvis Enterprises por US$100.000 millones, de los que sigue recibiendo US$20 millones anuales.