Una fiesta, un regalo, una lucha, una resistencia, un derecho y una necesidad. Todos esos conceptos utiliza Tomás Alzamora, director artístico del Festival de Cine Nacional de Ñuble, que este año celebra su 4° edición entre el 11 y el 15 de enero.
Fundado en enero de 2019, apenas un par de meses después de la creación de la Región del Ñuble, el festival nace con un objetivo a primera vista simple: hacer una muestra no competitiva de algunas de las películas chilenas más destacadas de 2018: "Mala junta" de Claudia Huaiquimilla, "La isla de los pingüinos" de Guillermo Söhrens y "La mentirita blanca" del mismísimo Tomás Alzamora.
"La mentirita blanca" fue filmada y producida en San Carlos, con gente de la región que actuó, produjo y fue parte fundalmental de una cinta que fue estrenada en Miami y se paseó por varios festivales en el mundo. Sin embargo, no había ningún lugar para mostrarla en Chillán y sus alrededores. "No teníamos una pantalla de cine en condiciones óptimas, es decir, un buen proyector y sistema de sonido envolvente de calidad 5.1", explicó en el podcast de #NosVamosDeVlog.
Si bien señala que siempre se puede proyectar películas en un muro blanco en pequeños centros culturales, con parlantes que alguien lleve de su casa, no había salas de cine. Eso sin contar las únicas dos salas que tiene el Cine Hoyts del Mall Arauco Chillán, las cuales, al ser sólo dos, poco y nada de espacio deja para producciones nacionales.
Al constatar la realidad de que una producción local no tenía un espacio de exhibición a su altura, Alzamora se unió a su socio Pablo Calisto, que ahora es productor del evento, fundaron el festival. En su primera versión, alojó a los invitados en su casa y, a puro ñeque, sacaron adelante el evento entre cuatro amigos con una pantalla inflable, yendo a distintos lugares rurales donde no habían centros culturales y proyectando las películas tomándose las plazas públicas.
Hoy, en su cuarta edición, el Festival de Cine Nacional de Ñuble se posiciona como el evento cinematográfico más significativo en la región con una Selección Oficial de las seis mejores películas nacionales de 2022, una competencia de cortometrajes donde siete obras compiten por el premio mayor y el Teatro Municipal de Chillán como centro de operaciones de un evento que se desplaza por varias localidades de la región. Además de contar con TVN como media partner y el apoyo de la Municipalidad de Chillán.
Eso sin contar el laboratorio de industria llamado Confluencias, la Escuela de Cine de Ñuble (instancia formativa dirigida a niñas, niños y adolescentes entre 11 y 15 años) y la Sala de Nuevos Medios y Realidad Virtual, un espacio interactivo de muestra y exhibición de 8 proyectos seleccionados de todo Chile, que mezclan innovación y tecnología de vanguardia, accesible a toda la comunidad.