La desaparición y asesinato de Yiseli Faldín Aré, una niña de 8 años conmocionó esta semana a Bolivia a manos de su vecina, una adolescente que la apuñaló 30 veces como sacrificio para realizar un "ritual satánico" en la comunidad de San Rafael.
La joven de 17 años confesó que mató a la pequeña con un cuchillo de cocina. Los restos fueron encontrados en una fosa a pocos metros de su vivienda, cubierto con un plástico azul.
Según el fiscal a cargo, Víctor Hugo Cervantes, la asesina cometió el macabro crimen para "realizar un sacrificio". En su dormitorio los investigadores encontraron imágenes y objetos para practicar actos de satanismo y magia negra.
Debido a la conmoción y la violencia con que fue ejecutado el infanticidio, las autoridades de San Rafael declararon tres días de duelo en honor a Yiseli y también convocaron una marcha para exigir justicia por ella y por la protección de los niños y niñas.
“San Rafael está muy compungida (…) no podemos entender cómo puede suceder algo de esa magnitud”, declaró el alcalde de San Rafael, Jorge Vargas, en entrevista con el canal Unitel.
Según datos del Ministerio Público boliviano, este año Bolivia registró 21 infanticidios. Las estadísticas indican que cada 10 días se asesina a un menor de edad.
La asesina de Yiseli Faldín Aré será juzgada por el delito de asesinato por la justicia penal juvenil, además de sus padres y un tío por los cargos de asesinado en grado de complicidad.