Las consultas de urgencia por lesiones autoinflingidas en adolescentes han aumentado considerablemente en los últimos años en Chile, llegando a triplicarse si se comparan las cifras de 2017 y 2022.
Según reportó El Mercurio, en 2017 hubo 2.595 casos y el año pasado fueron 8.058. Por sexo, las mujeres suman el 75,8% de las atenciones médicas por autolesiones.
Junto con ello, el número de atenciones del programa de salud mental en adolescentes llegó a 1,3 millones durante 2022, la cifra más alta en los últimos seis años.
"Distinguir de lesiones con intención de suicidio"
El ex subsecretario de Salud Pública Patricio Silva, académico de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Central, señaló que "hay que distinguir las lesiones autoinflingidas de las lesiones con intención de suicidio, porque las autoinfligidas tienen por propósito hacer un llamado de atención, pero no necesariamente llegar al suicidio. Por lo tanto, tienen una característica: son repetitivas".
"Es más frecuente en mujeres que en hombres. Eso siempre ha sido así y se mantiene esa tendencia (...) Estos niños deber ser evaluados por psiquiatras infantiles, que son quienes tienen las herramientas para evaluar si hay algo más, porque la pregunta que uno se hace es si estas lesiones autoinfligidas puedan ser signos de que la persona pueda llegar al suicidio si no tiene el apoyo adecuado", explicó el especialista.