Jaime Acuña, un joven de 17 años oriundo de Curacautín, lleva cinco días desaparecido tras viajar a Vallenar, en la Región de Atacama, para reunirse con un amigo. Su última aparición confirmada quedó registrada en un video de una cámara de seguridad.
Las imágenes, captadas el 31 de enero en un local comercial de Vallenar, muestran a Acuña acompañado de otro joven. Ambos vestían de negro y llevaban mochilas. Según lo informado, el adolescente habría conocido a esta persona a través de Instagram.
De acuerdo con la hermana de Acuña, él le había enseñado fotografías de su acompañante antes del viaje. Se trataba de un joven de apariencia similar a la suya, con el cabello largo peinado hacia un lado, que usaba una cadena y aparentemente vivía junto a su madre y abuelo.
El adolescente habría tomado la decisión de viajar con la intención de trabajar y generar ingresos, según le contó a su madre mientras se dirigía a Santiago. Esa fue la última conversación entre ambos.
“Mamá, perdóname, lo siento. Vas a pensar que soy el hijo más malo del mundo, pero voy de viaje. Te quiero mucho, voy a volver, pero voy a volver con platita”, relató su madre, Karen Espinoza.
El último indicio de su paradero surgió el martes, cuando envió un mensaje de audio a una amiga a través de Instagram. En la grabación, Acuña aseguraba estar bien, aunque sonaba angustiado, según explicó su madre.
Sin más noticias de su hijo, Espinoza viajó a Vallenar con la esperanza de encontrarlo.
“Yo solo le pido un abrazo y que me diga que está bien, y verlo sonreír, nada más”, expresó.