Un hombre falleció este miércoles cuando su vehículo fue arrastrado por una crecida provocada por las inundaciones que se están registrando en el norte de Francia, la primera víctima mortal de este nuevo episodio, indicaron las autoridades.
Se trata de un hombre de 73 años cuyo cuerpo apareció en el interior de un vehículo parcialmente cubierto por las aguas cuando, al parecer, trató de atravesar una vía inundada y fue arrastrado.
Su esposa había alertado a las autoridades de su desaparición cuando había salido del domicilio para comprar pan en una pequeña localidad del noroeste del país.
Casi dos centenares de viviendas han tenido que ser evacuadas en varias localidades francesas próximas al puerto de Calais, junto a la frontera belga, por las inundaciones causadas por la subida de las aguas de varios ríos, y en particular el Aa, que no se espera que remitan al menos hasta el fin de semana.
La Prefectura (delegación del Gobierno) del departamento de Pas de Calais indicó este miércoles en un comunicado que hasta las 11.00 locales (10.00 GMT) se llevaban contabilizadas 198 evacuaciones, de las cuales 48 durante la pasada noche.
Desde el inicio del episodio, el 30 de diciembre, los bomberos habían llevado a cabo 310 intervenciones de reconocimiento, a las que hay que añadir otras 153 de policías y gendarmes, señaló la Prefectura.
Además, desde el martes las autoridades comenzaron la distribución de botellas de agua al imponerse restricciones en el uso del agua corriente a 2.100 habitantes en las localidades de Rebreuve Ranchicourt, Hermin, Caucourt y Gauchin-Legal, por las filtraciones constatadas en las instalaciones de aprovisionamiento. Igualmente estaban privados de electricidad 1.450 clientes.
Durante esta mañana las evacuaciones continuaron en Arques y blendecques, donde el Aa desbordado había cubierto con hasta un metro de agua el centro de estas localidades vecinas
El servicio estatal de vigilancia de inundaciones Vigicrues mantiene en alerta roja desde el martes por la tarde el río Aa al constatar "una reacción excepcional" en esa cuenca por las "precipitaciones importantes" desde comienzos de semana, en unos suelos ya saturados por el agua.
En su página internet, Vigicrues indicó este miércoles por la mañana que el nivel del río, que ha llegado a su paso por Wizernes a 2,6 metros por encima de su curso normal, se está estabilizando. Pero advirtió de que las lluvias que siguen cayendo van a seguir añadiendo presión y podrían provocar una nueva subida, con una horquilla en su previsión de entre 2,40 y 2,80 metros.
También hay otros diez ríos en toda esa región del Norte, fronteriza con Bélgica, en vigilancia naranja: el Aisne, el Liane, el Hem, el Lys encima de Laquette, el Lawe-Clarence, el Oise, el Lys en la llanura, el Helpe, el Soire y el Canche.
Las inundaciones en esa zona están alcanzando la dimensión de las que afectaron a esa misma región en noviembre, y cuyos daños en su mayor parte no han podido ser todavía reparados desde entonces por la presencia continua del agua.
Desde el sábado, han estado movilizados 450 bomberos de Pas de Calais, a los que se debían añadir hoy otros 120 de otros departamentos, tras las instrucciones del ministro del Interior, Gérald Darmanin, que en su cuenta de X (antigua Twitter) dijo haberlas dado a petición del presidente, Emmanuel Macron.
Los servicios meteorológicos prevén para hoy un refuerzo de las precipitaciones en todo el departamento. Esta pasada noche cayeron allí entre 7 y 15 litros por metro cuadrado, según Méteo France, que advirtió de que para hoy se esperan unos 20-40 litros, aunque localmente podrían llegar a 50.