Desde hace cinco meses, la pareja conformada por la bailarina Maura Rivera y el exfutbolista Mark González se radicó junto a sus hijos en Miami, y desde entonces, manejan su centro de eventos, House of Mark, de manera remota. En entrevista con LUN, la pareja se sinceró sobre como es guiar un negocio a más de 6000 kilómetros de distancia.
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El negocio de Mark González y Maura Rivera
A pesar de que temían no poder funcionar al no estar presentes, Mark asegura que han podido mantener el negocio a flote. Según explica Maura, esto se debe a que tienen un equipo de confianza en el lugar, mientras que ellos se encargan de todo lo relacionado a redes sociales y el funcionamiento de la empresa.
Este equipo consiste de ocho personas dispuestas en las áreas de administración, producción, marketing y mantención del centro. Además, se suelen apoyar tanto en el hermano como la madre de Mark. "Me ayudan a verificar y a enfocarse en detalles. Ellos viven allá y tienen toda mi confianza", explica González.
Sin embargo, el exfutbolista afirma que lograr esto requiere estar encima todo el tiempo. "Tengo a mi mano derecha allá, que es una suerte de administrador. Hablo todo el día con él y me informa de todo lo que está ocurriendo, por eso estoy al tanto de las cosas", añade.
Mark y Maura: vivir en Miami, trabajando en Chile
Precisan que la dinámica comunicacional con el personal se realiza a través de mensajes de WhatsApp y reuniones por Zoom. El primero lo utilizan para casos más específicos, mientras que el segundo lo utilizan para reuniones largas sobre la realidad del negocio y coordinarse de mejor manera.
"Me preocupo todos los días de saber las novedades, por eso estoy con el teléfono en comunicación constante. Para mí es imprescindible el saludo diario, preguntar siempre cómo van las cosas. Hay que estar preocupado de que estén contentos los trabajadores, porque así rinden mejor y darán un mejor servicio"
Sin embargo, la pareja sostiene que es difícil mantener un control grande estando tan lejos, por lo que funcionan con base en la confianza con sus trabajadores. "Hasta el momento no han ocurrido sorpresas, espero no tenerlas", afirma el empresario.