Este miércoles "Urbanos, del barrio al éxito" emitió la segunda parte del capítulo en que Marcianeke fue protagonista. En la instancia, el cantante nacional mostró su faceta más íntima y se sinceró en una profunda conversación con María Luisa Godoy, a quien le comentó cómo ha intentado desintoxicarse y desligarse de las drogas.
"No ha sido fácil. He estado bajándole a las dosis. A veces cuando llego al momento de tener una recaída me pongo a hacer deporte altiro hasta olvidarme que está, pero no ha sido fácil. Yo llevo años drogándome harto y le he bajado", sostuvo.
Tal como menciona Marcianeke, este camino a la rehabilitación no ha sido fácil por la falta de apoyo, puesto que es él quien tiene que ayudar a sus padres: "Diosito no más. Mi mamá sí, pero ya llega un momento en que yo tengo que cuidarlos a ellos. No han estado las cosas bien en la familia, mis viejos están separados, no he asumido eso, preocupándome de mis cosas y ahora recién lo asumo teniendo a mi papá aquí, salvándolo de las veces que se ha querido matar".
Esta situación llevó a Marcianeke a traer a su padre a Santiago, quien padece depresión: "Lo traje para acá para cuidarlo ahora". Por otro lado, su madre tambuién ha recibido ayuda: "Los tratamientos se los he tenido que pagar yo, he estado de ayudarla psicológicamente".
"Es fome llegar a todo esto y sentirse vacío"
A sus 20 años, Matías Muñoz, oriundo de Talca, reconoce que este camino al éxito no ha sido fácil. "No le lloro a nadie, no me gusta mostrar que lloro… Nadie tiene que verme así, debo demostrar que estoy bien", y agrega: "No ha sido fácil. Es fome llegar a todo esto y sentirse vacío. Por lo que uno ha pasado. Yo he estado solo en esto, no he podido refugiarme en alguien, poder decirle mis cosas, siempre me he guardado mis cosas, pero siempre llego al límite".
El intérprete de "Dímelo má" insiste en que "trato de demostrar que estoy haciendo las hueas bien…no me gusta mostrar que estoy mal, hacerme la víctima, yo no le lloro a nadie".
Revisa el momento a continuación: